María Melba Calero/ maria.calero@connectab2b.com
El rezago productivo provocado por el Covid-19, siguieron golpeando fuertemente al sector construcción en todo Centroamérica. Según datos brindados por las cámaras de construcción de los países centroamericanos, en todos los países centroamericanos el sector presentó en el 2020, un decrecimiento de Producto Interno Bruto en comparación con 2019.
En este mismo sentido, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) proyecta una disminución del índice económico de un 9,1%, por lo que para Centroamérica la situación podría ser aún más desafiante. De acuerdo con el Ing Carlos Trejos, presidente de la Cámara costarricense de la construcción, el 2021 fue particularmente difícil en los primeros meses del año, donde aún se presentaban restricciones fuertes a la movilidad, la vacunación no había avanzado sustancialmente y la confianza del consumidor se encontraba debilitada.
A partir de mayo de 2021, las estadísticas de metros cuadrados tramitados ante el Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA) reflejaron un mayor dinamismo, aunque en términos generales aún no se alcanzan niveles previos a la pandemia. Al comparar la tramitación de 2021 con periodos sin valores atípicos se evidencian tasas de variación del -3.1% y -2.5% comparando con 2018 y 2017 respectivamente.
“A nivel de tasas de crecimiento, para el 2021 el Banco Central de Costa Rica pronostica un crecimiento de 5% respecto al período anterior, motivado principalmente por la construcción con destino privado, ya que la obra pública atraviesa un momento crítico, en donde la mayor parte del año ha permanecido deprimida a tasas cercanas al -13% mensuales en promedio”, expresa Trejos.
El sector construcción en Honduras se reactivó en un 70%, sobre todo con los proyectos privados que se ejecutan en la zona norte. La construcción de nuevas viviendas, ampliaciones y reparaciones tienen un repunte a raíz del aumento de remesas y las bajas tasas de interés.
En junio 2021 en San Pedro Sula, las inversiones en plazas comerciales, edificios verticales, grandes residenciales, no se detuvieron pese a la crisis económica derivada de la pandemia. Arnaldo Martínez, presidente del capítulo noroccidental de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (Chico), indicó en dicho mes que hubo un repunte de remodelaciones, ampliaciones, reparaciones y construcción de viviendas, lo que incide en la escasez de algunos materiales, como bloques y cemento.
Hay escasez de bloques de cuatro y medio, de seis pulgadas y los de ocho pulgadas. Cuando uno va a buscar bloques le dicen que tienen que regresar dentro de 15 a 30 días. El transporte es otro problema, porque traer los materiales del exterior es costoso. Aumentó mucho. Antes un furgón costaba US$3.400 y hoy cuesta US$10.000. Están haciendo su agosto las navieras”, expresó en su momento Martínez
En Nicaragua el 2021 representó un año positivo, para los miembros de la Cámara de Urbanizadores de Nicaragua(CADUR), al lograr duplicar la venta de viviendas con respecto al año pasado que se cerró con la colocación de unas mil viviendas; este año estamos por cerrar con dos mil casas, lo que representaría aproximadamente US$70 millones, lo cual significó un crecimiento de más del 80%.
Un factor clave que permitió la recuperación del sector, fue la reactivación del crédito hipotecario que oferta la banca nacional, esto es importantísimo, porque el 99% de las ventas son realizadas por el crédito hipotecario a largo plazo.
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Recuperación del sector
Para el año entrante Costa Rica espera una recuperación gradual del sector, aparejada a la recuperación de la actividad económica en virtud de la reducción de las limitaciones a la movilidad y el aumento del empleo. Por ejemplo el Banco Central de Costa Rica, BCCR, pronostica un crecimiento de 4,3% en el PIB construcción para 2022, asociado al crecimiento de la construcción con destino privado, fundamentalmente en lo que respecta a construcción de naves industriales, locales comerciales, edificios y parqueos.
En el 2022, la meta del sector urbanístico en Nicaragua, es construir más de dos mil viviendas que permitirán un crecimiento en la edificación.“Cada vivienda genera 20 empleos directos y 80 trabajos indirectos, por lo cual vemos un gran impacto en el empleo y sobre todo hace que la dinámica de la construcción de viviendas se mantenga y crezca y estemos listos para una posición mejor de cara al próximo año”, enfatiza Félix Baltodano, presidente de la Cámara de Urbanizadores.
A pesar de los retos que vive el mundo, con la pandemia causada por el Covid-19, República Dominicana mantiene un buen ambiente y estabilidad para el sector de la construcción y la adquisición de viviendas, según expresa Sadery Abreu, CEO Expo Feria Inmobiliaria Construmedia 2021.
Según Sadery Abreu, los proyectos que se desarrollaron en el país en el 2021, tanto de capital dominicano como de inversionistas extranjeros se mantienen en franco desarrollo, gracias a los esfuerzos y visión de importantes constructoras del país, que continuarán ejecutando proyectos con altos estándares de calidad y seguridad en el 2022. “Estos proyectos no sólo son realizados por firmas dominicanas, sino que se convierten en fuentes de inversión extranjera, con empresas que han aportado a que este sector se eleve a un nuevo nivel, además del clima de estabilidad que caracteriza a República Dominicana para este mercado”, manifestó Abreu.
Para la inversión del sector público la Cámara Salvadoreña de la Construcción (CASALCO) espera que el Gobierno haga llegar los planes de inversión de los principales ministerios y principalmente del Ministerio de Obras Públicas y Transporte (MOPT). “Estamos trabajando con la Secretaría de Comercio e Inversión, con Miguel Kattán, y están encargándose de proporcionarnos la información que están cuadrando con las diferentes instituciones siendo las principales para nosotros MOP, Fondo de Conservación Vial, ANDA, CEPA, CEL y en Ministerio de Salud. Ya sabemos de varios proyectos, uno de ellos es el Puente Arce, paso fronterizo de El Salvador con Guatemala, la continuación del Baipás de San Miguel y el proyecto Los Chorros, que ya está en su fase de diseño”, dijo Velásquez.
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Por su parte la Cámara Panameña de la Construcción (Capac) afirma que en la parte privada del sector, la única actividad que tiene un movimiento y por ende apoya a la industria es de la vivienda que está en el rango de interés preferencial. Jorge Lara, presidente de la Capac, visualizó un poco difícil la recuperación en el 2021 pero el sector se mantiene a expectativa que pueda mejorar más en el 2022.
El crecimiento del sector está marcado por el incremento registrado principalmente en el municipio de Panamá, donde se concentra el mayor movimiento de construcción. Entre enero y julio, se aprobaron inversiones por US$274.5 millones, mientras que en el mismo período del año pasado fue por US$188.8 millones, una variación al alza de 45.3%
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