La crisis en obra pública amenaza la competitividad del país y la calidad de vida de los habitantes.
En el transcurso del año 2023, el sector de la construcción en Costa Rica ha experimentado un contraste notable entre la actividad dinámica de la obra privada y la persistente crisis en la obra pública, reflejando la insuficiente inversión gubernamental en infraestructura a lo largo de varios años. El Ing. Carlos Trejos, presidente de la Cámara Costarricense de la Construcción (CCC), abordó estos problemas en una conferencia de prensa llevada a cabo el 14 de diciembre, señalando la amenaza que representa para el clima de negocios nacional y la competitividad del país.
Aunque el sector construcción contribuye con el 4.0% al Producto Interno Bruto (PIB), evidenciando una recuperación respecto al año 2022, la cifra aún se encuentra por debajo del promedio histórico del 5%. Aunque la obra privada ha mostrado dinamismo, la obra pública enfrenta una grave crisis en distintos aspectos, como infraestructura vial, educativa, salud pública, infraestructura hidráulica y vivienda de interés social.
El estudio de la obra pública en la construcción total del país ha experimentado una disminución drástica, pasando del 20% en el periodo de 1991-2020 al 10% entre 2021 y 2023. Esta caída destaca la urgencia de abordar la crisis en la infraestructura pública, lo cual se suma a la disminución en la asignación de viviendas de interés social, un componente esencial para el desarrollo equitativo del país.
En el ámbito de la infraestructura vial, se han identificado problemas de gestión que afectan el desarrollo de proyectos y el cumplimiento de plazos debido a deficiencias en las etapas de pre ingeniería. La última Matriz de Pre Ingeniería revela una falta de avance en etapas cruciales como la "Confección del Cartel", señalando una sequía de proyectos nuevos.
Le puede interesar: Conozca las principales tendencias en el sector construcción para el 2024
El Ing. Trejos subraya la necesidad de una planificación integral de la infraestructura, ejecución eficiente y programación ágil basada en una Política de Estado, no en planes gubernamentales de corto plazo. Advierte que la falta de acción afectará la competitividad y la calidad de vida de los ciudadanos.
La diferencia entre obra privada y pública en 2023 es evidente. A pesar del dinamismo en inversión y ejecución de proyectos privados, la falta de desarrollo en infraestructura pública genera una drástica reducción en la inversión a largo plazo.
En cuanto a las acciones prioritarias para el 2024, el Ing. Trejos aboga por mejorar la eficiencia del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AYA) para garantizar el abastecimiento de agua potable a corto, mediano y largo plazo. Esto implica ejecutar proyectos de emergencia y establecer una hoja de ruta clara para los megaproyectos de Reducción de Agua no Contabilizada (RANC) y el Proyecto de Ampliación del Acueducto Metropolitano (PAAM).
Además, la CCC urge al Gobierno a abordar el rezago en la inversión pública, proporcionando la infraestructura necesaria para respaldar al sector privado en el traslado de mercancías y la movilización de personas. Se resalta la necesidad de expandir las Alianzas Público-Privadas para fomentar el desarrollo.
Comments