Por: Arq. Geovanna Calderón Sánchez, extracto de su tesis en Planificación Estratégica
Según el Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo (INVU) e Instituto Costarricense de Turismo (ICT), ningún plan regulador costero o urbano vigente ni en proceso de aprobación cuenta con la variable de CC incorporada, y a pesar de las actualizaciones de los manuales para la elaboración de PR, al no existir una guía para la formulación e incorporación de dicha variable en los instrumentos de planificación, se espera que dicho componente sea deficiente, ya que la calidad de este y los componentes que se tomen en cuenta para su elaboración quedarán a criterio únicamente del mismo gobierno local.
Aunado a lo anterior, es importante tomar como factor dentro de la problemática el desligue entre el sector técnico, jurídico y político, un ejemplo consiste en que aunque desde la gestión de riesgos el tema se maneja como un tema político, los gobiernos locales aseguran no tener fondos para elaborar nuevos estudios ambientales, estrategias o actualizaciones de planes reguladores, ya que los costos son extremadamente elevados.
Debido a lo anterior se evidencian varias dificultades a nivel país para la implementación de acciones climáticas en la planificación local, las cuales según el INVU deberían estar implementadas desde los planes reguladores:
A nivel político, hay presiones y promesas, se promueve la elaboración de políticas y planes sin conocer el trabajo y necesidades interinstitucionales ni las necesidades de las municipalidades.
A nivel jurídico, hay vacíos legales e inseguridad, no solo por la carencia de normativa, sino también por las atinencias y competencias institucionales, las cuales convergen en varios puntos, por ejemplo, en temas de Cambio Climático rige la DCC, pero en temas de riesgos rige la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), en temas de territorio rige el INVU, ICT y municipalidades, según corresponda y en temas ambientales la Secretaría Técnica Nacional Ambiental (Setena), todas hacen su trabajo, pero el trabajo interinstitucional ha sido poco y lento, por lo que el insumo en la normativa de la planificación local está en un proceso que puede ser largo.
A nivel técnico, dada la problemática anterior, no se tiene con qué trabajar ni aplicar, más que con los insumos académicos o técnico-profesionales que se puedan adaptar y que según las posibilidades de cada Institución se logren desarrollar; sin embargo, no puede ser de carácter obligatorio, sino optativo; por lo tanto, depende de la consciencia y poder adquisitivo de cada gobierno municipal.
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